A la semana siguiente de la salida a la Mostayal, realicé una nueva excursión a la zona del Aramo en esta ocasión formando parte de una colectiva del Grupo Montañero Vetusta. He de decir que pese a ir todos los jueves a la sede social, tan solo en esta ocasión salí con el grupo. Siempre me gustó moverme a mí aire y al igual que ningún verano fuí al campamento del junior al que iban mis amigos, tampoco me atraía la idea de las excursiones colectivas pese a que pudiera parecer una contradicción ya que a ellas acudía gran parte de aquellos con quienes tanto charlaba sobre las montañas y de quienes tanto aprendí. Pero me gustaba mas ver las proyecciones, charlar con ellos, consultarles dudas y luego experimentar in situ a mí manera.
Sobre esta excursión tengo un vago recuerdo de las ventiscas azotándonos así como la sensación de tranquilidad pese a todo aquello que pasaba: viento, nieve, niebla. De no estar con ellos, seguro que la sensación habría sido otra muy diferente.
Este es el relato de aquel día:
En los comentarios puede verse que van surgiendo proyectos para nuevas salidas y que poco a poco voy conociendo a quienes por aquellas fechas pateaban incansablemente por el monte por lo que no era raro encontrarlos en él.
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario